El Ministerio de Obras Públicas lanzará la licitación en 2013 y espera que las obras estén terminadas a fines de 2014.
por C. Vásquez y N. Ramos
La capacidad de realizar 20 mil operaciones anuales tendrá el nuevo aeródromo que se proyecta construir en la Región Metropolitana, en la zona de Peldehue. El inicio de las obras fue anunciado esta semana por el Ministerio de Obras Públicas (MOP), luego que el martes una avioneta que se dirigía hacia el aeródromo de Tobalaba capotara en un área residencial de La Reina, sin que se produjeran desgracias personales.
Este accidente hizo reflotar la discusión sobre una eventual erradicación del aeródromo de la zona oriente de Santiago, medida que fue rápidamente rechazada por las autoridades. También generó debates sobre la accidentabilidad en este recinto e hizo recordar el trágico accidente de 2008, en que una avioneta de instrucción cayó en una cancha en Peñalolén, ocasionando la muerte de 13 personas.
La decisión de ejecutar esta obra en Peldehue se remonta a 2009 y fue adoptada por una comisión de expertos, constituida tras la tragedia de Peñalolén.
“Actualmente, el MOP está finalizando los estudios y trámites del plan de manejo forestal, que nos va a permitir comenzar con el proceso de licitación de este aeródromo, una vez que esté aprobado el proyecto por el Ministerio de Desarrollo Social”, explica la recién asumida ministra de Obras Públicas, Loreto Silva.
De acuerdo con el proyecto, el aeródromo tendrá una pista de 1.150 metros de largo, por 23 metros de ancho. Además, contará con una plataforma para estacionamientos de aeronaves; calles de rodaje, torres de control e instalaciones para la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC). También está considerado un camino perimetral y una planta de tratamiento de aguas servidas.
El acceso vial al recinto será por la Ruta 57 CH. Este será construido en un área próxima a la Brigada de Operaciones Especiales del Ejército, actual propietaria del terreno.
Según Loreto Silva, “estimamos que el proceso de licitación comenzará durante el 2013 y así tendremos las obras terminadas a fines de 2014”. La inversión estimada del proyecto es de $ 7.500 millones, los cuales serán aportados por el gobierno regional.
Debate
Independientemente de si se construye este nuevo aeródromo, los gremios ligados a la aeronáutica civil han defendido la continuidad de las operaciones en Tobalaba.
Hans Gesche, presidente del Club Aéreo de Santiago, explica que el proyecto de Peldehue surge con posterioridad al cierre del aeródromo Los Cerrillos, el cual dejó de operar en el año 2006. “Al cerrarlo, se genera la capacidad de tener que crear otro, pero que no es en reemplazo de este (Tobalaba), sino que de lo que se cerró”, explica Gesche, argumentando que esto produjo “una carga mayor” para el aeródromo de La Reina.
Respecto de esta discusión, la ministra Silva sostiene que “el aeródromo de Peldehue permitirá disminuir el flujo aéreo que hoy tiene el aeródromo de Tobalaba”.
Añade que “hay que considerar que el aeródromo de Tobalaba tiene una ubicación estratégica, que nos permite actuar frente a emergencias de diversos tipos, dada su cercanía con centros urbanos y centros asistenciales”.
Desde la DGAC, quienes serán los encargados de administrar el funcionamiento del aeródromo, sostienen que una vez que se construya y se entregue la obra, generarán un plan de trabajo para incentivar el uso de este nuevo aeródromo.
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